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Soy más de pueblo que un arado. Capítulo 3: El tractor fantástico

Soy más de pueblo que un arado. Capítulo 3: El tractor fantástico

                        "Ande o no ande, la burra grande"

 

Querido urbanita almendrón:

 

    Tú te piensas que en la ciudad tenéis los medios de transporte más modernos y avanzados. Qué si tren, qué si metro, qué si tranvía, qué si autobús –otobús, en chanante-, qué si coches último modelo… Pues todo eso, una mierda al lado de lo tenemos en los pueblos. En los pueblos tenemos nuestro propio sistema de comunicaciones, con unas normas viales que causarían sudores fríos al director de la DGT. Por eso, para que no sufras un choque cultural –ni de coche- en tu visita al mundo rural –rural world, en inglés- te voy a dar unos apuntes sobre lo que hallarás.

 

La variedad de vehículos es inmensa, ya que todo que ruede puede servir para desplazarse. Ahí van los más comunes:

 

En primer lugar está el tractor. He aquí el mayor ejemplo del pragmatismo rural: lo mismo vale para transportar productos agrícolas que personas. Aunque hay muchas marcas, destacan los Massey Ferguson y los John Deere. Los tractores tienen que respetar unas normas de seguridad, pero la gente se las pasa por el forro: el pirulo de seguridad y la barra antivuelco duermen el sueño de los justos en el almacén. El tractor es un vehículo diseñado para una sola persona, pero eso tampoco se respeta. Siempre va sentado alguien a la izquierda del conductor, sobre el guardabarros. ¿Por qué nunca a la derecha? Porque a la derecha están las palancas de mando y se las clavaría por el ojete, y no es plan, porque hay mucho bache…a menos que sea muy vicioso, claro. Hay otras posibilidades, como que varios pasajeros vayan sentados en el remolque. Se corre el riesgo de caerse al camino, pero ¿dónde no se corren riesgos? También cabe la posibilidad de que la caída sea frenada por la barra de enganche al tractor. El que suscribe tuvo esta bonica experiencia; concretamente la parte del cuerpo que frenó la caída fue la entrepierna. El grito hizo llorar a los perros.

 

Los tractores tienen que cumplir con su propia ITV, la ITV agrícola. Básicamente existe para que los jubiletas se la salten impunemente, porque sus tractores son de cuando Franco inauguraba pantanos. A los yayos además les quitan el carné de conducir porque ya no rigen bien, pero ellos siguen llevando el tractor porque saben más que los médicos, dónde va a parar. Por eso, si te encuentras un atasco del copón en un pueblo, no lo dudes: delante hay un yayo en su tractor.

 

En segundo lugar encontramos otro gran clásico rural: el motocultor. Este un vehículo específicamente de yayos. Consiste en un motor con ruedas y unas barras para dirigirlo. Ideado para labrar pequeñas parcelas, los yayos descubrieron que si se le unía un remolque con asiento, constituía un excelente vehículo para ir al huerto con la parienta. Eso sí, un vehículo que no va a más de15 km por hora. Por eso, si te encuentras un atasco del copón en un pueblo, no lo dudes: delante hay un yayo en su motocultor.

 

En los pueblos también tenemos coches, aunque sería más adecuado hablar de furgonetas. Aquí la reina ha sido durante muchos años la Citroen C-15. Hubo pueblos en la que sólo había C-15 por la calle y daba un pelín de miedo porque parecían de una secta, todas con pegatinas del estilo “Mi pueblo mola”. Algún valiente decidió innovar y se compró una Seat Terra, pero la gente lo miraba raro. Ahora que ya no se fabrica la C-15, una especie de tradición secular lleva a los paisanos a comprarse la Citroen Berlingo. Hay algún valiente que se compra la Seat Kangoo, pero la gente lo mira raro; una leyenda incluso dice que salen defectuosas de fábrica. Una cosa que también te sorprenderá es la capacidad de estás furgonetas. El fabricante asegura que son de cinco o seis plazas, pero esto en los pueblos nos trae al pairo. Tranquilamente podrás ver a diez o doce ocupantes en su interior, además de llevar el maletero lleno de aperos. Uno tiene la sensación de que están ensayando por si algún día vuelve el mítico programa Qué apostamos.

 

Por supuesto, las dos ruedas tienen su lugar en los caminos rurales; tanto motos como bicicletas son usuales entre los yayos. Eso sí, estos vehículos necesitan ser adaptados para poder transportar los productos de la huerta. Aquí nace una de las mayores aportaciones de los pueblos a la humanidad: la caja de fruta atada con cuerdas al guardabarros trasero de la moto. La prehistoria del tunning está aquí. La forma correcta de conducir una moto es mientras se fuma una faria; da la sensación de ver un tren a vapor.

 

Una vez vistos los tipos de vehículos, te voy a iluminar con las normas de tráfico de un pueblo:

 

- Los intermitentes están de adorno; qué más te da hacia donde vaya a girar el que tienes delante.

- El cinturón tampoco es obligatorio en el interior del pueblo ni en sus caminos.

- Las señales están colocadas a título orientativo, se pueden respetar o no.

- No es necesario conocer quién tiene la preferencia: pasará primero el que más cojones tenga.

- Los cruces se cogen por la izquierda, que así se abrevia.

- El chaleco reflectante no tiene mayor utilidad que ser una bonita funda para asientos.

- En moto, el casco sólo es obligatorio si se está en el campo de visión de la Guardia Civil.

- Las zonas de aparcamiento son las que quedan más cerca de casa; si hay vado, da igual, porque en los pueblos no acude nunca la grúa.

- El haber bebido alcohol no es un impedimento para conducir; los controles de alcoholemia en el interior del pueblo son un mito. Eso sí, te arriesgas a acabar dentro de una acequia.

- Cuando te cruzas con un vecino en un camino, la cortesía impone saludar con la cabeza y sonreír; esto no impide que aprovechando que el ruido del motor te cubre, murmures “mira a ese grandísimo hijo de pu…”.

 

Hasta aquí la lección de hoy. El ingenio decae, pequeño e ignorante urbanita, pero puede que haya otro capítulo. Se aceptan propuestas.

 

 

Dedicado a Ylenia, que me propuso este post.

 

 

 

6 comentarios

Comentarista oficial de JB -

Me gustaría añandir, como memoria histórica, un medio, que pese a que ya no suele utilizarse: El burro.

No tengo demasiada edad, pero recuerdo en mi infancia ver por el pueblo, al yayo labrador-jinete de burro, que subía del huerto cargado de borrajas y acelgas en la farda, y sin una gota de vino en la bota. Esto se podía distinguir por el paso que llevaba el burro (me refiero al de 4 patas).

Aquello si que era echar las tardes bien:
Que si "me espero en el bar, a que se recupere el animalico del pechugazo pa subir al pueblo".
"¡La virgen a cuatro patas! El cabron del pollino me sa comido el almuerzo otra vez".

-"Menudo está echo el mio, estando en la herrería pusiendole zapatos ma cascao una coz que casi me estozola".
-"Eso nos nada, a mi cuñao le arreo en las partes y dice que con la maria ya no puede..."

¿Cuánta historia se queda por el camino? Aquello eran conversaciones y no las actuales sobre la potencia del jondere.
De aquello habia conocimiento de causa, de esto otro solo hay gestión de la ignorancia del vecino, no conocimiento...
Bueno, en mi pueblo nunca hemos tenido demasiado...

Chic -

Jajaja, genial la tercera entrega. Se nota que prescindes de Sophia Coppola (déjala a ella con sus cosas) y te centras en lo importante, que es hablar de mi pueblo.

Yo no he encontrado a faltar ningún vehículo, y veo que has hecho bien, para no caer en la nostalgia, de hablar de esos entrañables carricoches que se construyen cuando se es joven y despreocupado.

oscar -

Ay, lo siento Dani. Es que lo mio nunca han sido los temas automovilísticos e incluso pasé un borrador a un experto para que corrigiera cosas. Es lo que tiene hacer caso de las sugerencias. Barajé incluir la mobilete, pero no se si un almendrón sabe lo que es. Sobre la Express, fue olvido y pereza... No me cuadraba el post. Estoy barajando un post sobre lobbies de poder en el rural world. Acepto sugerencias, pero después haré lo que me salga de... Gracias por comentar, Dani.

Dani -

Cómo que Seat Kangoo????? Renault, Óscar, Renault!!!

¡Ah!, las C-15 son numerosas pero, en Alcorisa, al menos, las reinas fueron las Renault Express.

Me habría encantado una referencia en el apartado de las dos ruedas, a uno de los mayores iconos rurales: la Mobylette.

Espabila con la cuarta entrega, y suerte por el diario decano!

oscar -

Emocionado estoy, Mari. Muchas gracias por lo que dices, es de verdad bonito. Haré lo que pueda, por lo menos lo intentaré que no es poco. Un beso, un abrazo. Nos vemos, kinta y amiga.Gracias de verdad.

mari -

Hola!!He dudado en escribir,porque,tanto palabro se me escapa de mis manos(soy chica de pueblo)pero muy inteligente(que se sepa)jajajajaja.Bueno,me presento,soy Mari,del magnífico pueblo del Baix Cinca,llamado Belver,conocí al magnífico escritor de este blog,casi en el hospital,ya que nacimos el mismo día,así que si os acordaís de felicitarlo,un pensamiento hacia mí,jeje,ya echas las presentaciones,sólo quería mandarle un saludo a un gran chaval,como es el SR.Óscar,y desearle un buen comienzo de máster,que creo que va a ser un,si se permiten "palabrotas",cojonudo periodista,como aqui a demostrado.No sabía de la existencia de este blog,pero una vez leido me a parecido genial,aunque a mi la política no me interesa mucho,pero la e leido,y me gusta leerla asin.Me gustaria Sr.Óscar que me aconsejaras más libros,y que sigas escribiendo lo del pueblo que me a gustao mucho,pero di algo positivo,porque yo vivo aquí,y aunque no me guste mucho hacerlo,la gente que quiera visitarlo,casi que se lo pensará,(yo me lo pensaría)pero que sepas que estoy completamente de acuerdo con lo que escribes,porque este pueblo es asin,pero de cara al escaparate,tú, has publi!!Bueno,pues lo dicho,espero que leas estas líneas,que he querido felicitarte por ésta tú andadura,y desearte lo mejor en tus proyectos venideros,y ya te iré escribiendo,aunque sean tonterietas,si quieres también te mando citas,que me gustan bastante,y tú pon alguna que pueda copiarla.Me despido,con un beso y abrazo,y mucha suerte.
Tu kinta(y amiga):::MARI