Blogia
oscarsenarcanalis

Fauna incomún

Fauna incomún

Acto 1

03.00 de la madrugada del sábado.

Una pareja de jóvenes regresa a casa después de salir un ratico por la Madalena. Son pobres, pero pillan un taxis hacia San José. Cuando van a meterse en el portal, aparece un gatico maullando ante ellos.

Ella: ¡Ay, qué gatico más majo!

Él: Muy bien, vamos a dormir.

Ella: Pero miralooo, que majo es, y está solito.

El gatico usa su mirada tierna, maulla, y se deja acariciar.

Él: Será de alguien, déjalo ahí y ya sabrá buscarse la vida.

Ella: Pero va a llover y a ver si lo va a atropellar un coche...

Él abre la puerta del portal, y el gatico se mete para adentro impunemente. Vuelve a abrir la puerta, y el gatico sale. Cuando está dentro, quiere salir. Cuando está afuera, maulla y rasca la puerta para entrar. En esas pasa un yayo -¿qué hará un yayo a esas horas por ahí?-. El yayo les insta a que lo metan dentro del portal, que a ver si lo van a atropellar. El gato entra y da pena. Ella, corazón sensible, le baja un tazón de agua. El animalico pasa del agua. Ella sube de nuevo a por un papel para dejar una nota en la puerta y que nadie lo eche a patadas a la calle, que el gatico será de algún vecino. Mientrás, él espera, y el felino se acurruca a su lado. Ella baja con la nota, y en esas llegan un par de vecinas. Una pasa del tema, la otra no.

Vecina: ¡Ay, el gatico!

Ella: Pobrecico, ¿qué hacemos?

Él: Déjalo aquí, ya se apañara...

Las dos: ¡Ay, el gaticoooo!

El gatico de los cojones se revuelca por el suelo y se deja acariciar. Eso es trampa, piensa él. Al final acuerdan dejar una nota que reza algo así como: "Anoche apareció un gato en el rellano, el dueño debe de ser del bloque, no dejar salir". Con la conciencia más tranquila, los tres cogen el ascensor y suben a sus respectivos pisos. El gato, obediente, se queda abajo.

Acto 2.

04.00 de la madrugada.Los jóvenes, con el pijama puesto, se disponen a dormir. Él, plácidamente. Ella, no.

Ella: ¡Ay, el gaticoooo!

Él: Dejalo estar que estará bien...

Ella: ¡Ay, el gaticoooo!

Él: Que sí, que sí...

Ella: El gaticoooooooo...

Finalmente, se forma un operativo de rescate. El gatico sube en el ascensor, y se instala sobre una cama de una habitación libre. El gatico, contento; ella, tranquila; él, sueña con que el gato le lame la cara. Entre sudores frios grita: ¡El gaticooooo!

Acto 3.

10.30 am.

El animalico ha decidido esconderse debajo del edredón, y el operativo de localización no deja dormir. La gran pregunta.

¿Qué hacemos con el gatico?

Él vota por mandarlo a escaparrar; ella lo desaprueba, pero es alérgica a los gatos. Él, cagándose en el puto gatico de los cojones, recurre a la respuesta habitual a todas sus grandes dudas: el primo Chic.

El primo Chic remite a la asociación Alborada, con la que ellos tienen un gato de acogida en su piso. Ellos son el primo, Dani y la prima del primo. En la oenegé no dan más respuesta que, si lo llevan a la protectora del ayuntamiento, allí lo matarán en tres días. ¡Ay, el gatico!

Se impone llamar a Dani. Es como un ángel de la guarda de los animales. En su piso de acogida tienen a los periquitos Melocotón y Madalena, a la coneja Yoko Ono y a la gata Audrey (en la imagen). Dani es una buena persona, es una especie incomún, y decide acoger al gatico de los cojones.

El gatico de los cojones es muy bonito, muy bueno y muy, muy cariñoso. Ella lo salvó, Dani lo acogió... Solo falta alguien que lo adopte. Él, el desalmado de esta historia, no será el que lo haga.

 

7 comentarios

oscar -

El gatico ya tiene hogar, se va a ir a un pueblo de Teruel.

mari -

Hola Oscar!!jajaj me reido mucho con la historia...yo porque ya tengo dos perritos,y ya sabes que los gatitos y los perros...muy bien por "Ella" yo hubiera echo lo mismo,jeje,por cierto e leido tu entrevista,y mola! ahi ahi haciendo publi al "Poble",jeje bueno a cuidarse...y Dani: cuida del gatito .jejje..deww

Natxo -

Molt bona història. I ànims per al desalmat. Alguns l'entenem ;)

Chorche -

Grande! :) A ver si tiene suerte!

dani -

Y que íbamos a hacer una vez recogido no se le puede hacer ningún daño.Y lo a gusto que esta sobre el sofá tumbado...

Por cierto muy bueno el post, además no sabia que primero lo habíais dejado en el patio...jeje

oscar -

Graciaaas. Me he olvidado de contar que el gato se ha zampado una lata de bonito del norte en aceite de oliva... tonto no es.

aprendiendoaescribir -

¿No odias vivir en una casa de alguiler y con compañeros de piso alérgicos a los animales? Seguiré cuidando de mis gaticos y perricos imaginarios...

Muy buen post, Óscar. Hacía tiempo que no me metía. ¡Un beso!